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miércoles, 5 de abril de 2017

A FARDAR SE HA DICHO!

Como decíamos en otra entrada, hay cosas que nunca cambian. Diferentes factores de la historia de la humanidad permanecen impertérritas a lo largo del tiempo. Cuando, en el futuro, unos entes de otra galaxia den con nuestro abrevadero planetario y, si se aburren, investiguen nuestra "civilización", su cuerpo de antropólogos determinará que el ser humano tenía una serie de costumbres fijas, independientemente de la época, ya fuere en las cavernas con paredes de piedra como en las de muros cibernéticos.

Hoy no voy a hacer una enumeración de todas esas tradiciones, si no que me centraré en una que me llama particularmente la atención. Está claro que la continuidad costumbrista de la que hablaba antes no es sinónimo de algo malo! Los hábitos de comer, de beber, de relacionarse, de divertirse... también hay algunas cosas marcadas en nuestro ADN realmente chungas, como el machacar al prójimo, el sobrevivir a base de matar, el ansia de poder y riquezas... asuntos demasiado serios para ser tratados por un historiador de baja estopa como yo.


Por el título del asunto de la semana ya podéis ver por donde van los tiros de mi desajustada escopeta. No sé quien acuñó la frase "Dime de qué presumes y te diré de qué careces", y no seré yo quien cuestione semejante afirmación. Lo que me llama poderosamente la atención es que las personas, si, fardamos un montón... pero en muchas ocasiones de cosas que no tienen ningún sentido!

Veamos... el sentido al que aludo es tan relativo como el estatus del emisor y el receptor... Si una eminencia en matemáticas va presumiendo a un Tronista de que ha solucionado la ecuación de Raticulínedeclonoides, y que cuando quiera le baja al gimnasio los 3453 folios impresos a 2 caras que lo demuestran, el impacto en el vigoréxico que escucha será como si una hormiga envistiese a un elefante, y aunque matemático y abdominazerman compartan lo de los Catetos, sin duda ese presumir se perderá en el tiempo como lágrimas en la lluvia (que bonito me ha quedado... tendrían que hacer una película donde salga esa frase...).

Tras tanta divagación... Presumir de ciertas cosas, para mi parecer, es totalmente absurdo, y lo peor... mucha, pero que mucha gente, alardea de cualidades de muy dudosa calidad! Si! Y muchos de nosotros lo hemos hecho, o lo hacemos en la actualidad!!! Menudo lío, no? Voy a poner ejemplos demostrativos, que si no mi teoría va a dejar de sostenerse.

1- Yo soy muy buen@, pero cuando me provocan, soy lo peor.

Hay diferentes variantes de la frase, pero ésta misma nos irá bien para el análisis... Qué tiene de presumible esto? Es envidiable? De verdad lo creéis? Entendería que la oración se quedase justo antes de la primera coma. Fardar de la bondad puede ser bonito. Luego será cierto o no, pero quien no querría ser George Bailey en Qué Bello es Vivir, aunque luego la realidad le asocie más con el Señor Potter?... pero esa puntualización... Es bueno pero de repente, ante alguna circunstancia deja de serlo y se convierte en un ser abominable??? Supongo que cuando alguien dice esto en realidad está pensando en que es un humano entrañable que ante la adversidad o la presencia de los malos malísimos se convierte en Hulk? Por favor, si ni siquiera Bruce Banner quería ponerse tan enérgico!!! Mirad lo que os digo... yo tengo una extraña cualidad para ponerme como un energúmeno gritón, agresivo y violento cuando un coche no se para en un paso de peatones, y me da una vergüenza bestial! Ya ni os cuento cuando ha pasado yendo con mis hijos. Qué debería hacer? Al llegar al otro lado del paso de cebra poner voz de General y decirles "Hijos... aprended lo que es un peatón que clama por sus derechos!"?. A la porra, no compro la frasecita!

 Videoconferencia con el premio Nobel de la Paz, justo cuando se le comenta que la dotación económica del premio no está exenta de impuestos


2- Yo puedo comer lo que quiera, que nunca engordo.

Ésta es especialmente buena. Presumir de una disfunción en el sistema endocrino no parece lo más acertado! Imaginad a gente diciendo: "yo por más que me lavo, siempre estoy hecho un cochino", por no hacer un ejemplo con enfermedades, cosa de mal gusto... Ahhhh... ya lo pillo... aquí el flipe es que comen como toda una piara porcina pero mantienen el tipín de Christian Bale en Batman (ya el nivel de El Maquinista no pueden mantenerlo). Mmmm... si, tal vez haya un hilillo donde agarrarse para el farde de los bufetes libres, pero fijaos que siempre, SIEMPRE la frase acaba con el emisor dándose golpecitos en la barriga, y el sonido de las palmaditas no suena a hormigón precisamente. Un excompañero de extrabajo casi pasó a ser exvivo, él que siempre enarbolaba la frasecita, tras ganar como 15 kilos en medio año y tirarse 2 meses de baja por una úlcera de estómago...

"Ufff... anoche me puse como el quico..."

3- Yo siempre tengo calor.

Ante estas palabras quedo siempre congelado. No le funciona el aire acondicionado del coche? Cuando va de picnic sólo encuentra ese lugar que queda expuesto al sol? Su termómetro indica que vive sumido en la hipertermia? No! No va por ahí!!! Cabe decir que, al igual que monstruos afectados con rayos gamma y personajes con estómago de pez los hay de ambos sexos, el porcentaje de los calurosos sube misteriosamente hacia el bando masculino. Si! Porque presumir de calor, es, parece ser, sinónimo de virilidad! Esos mismos tipos que siempre tienen que ir quitándose prendas de encima continuamente puntualizan que "el frío es de mujeres". Joder... nací con el sexo equivocado! Yo siempre estoy helado! Mis manos son un témpano de hielo, y siempre están buscando donde meterse para que la sangre quiera volver al hogar de sus capilares dáctiles! Y si... siempre que lo comento sale alguien a decirme "tienes manos de mujer"... Los que hayáis hecho la mili entenderéis lo que explico a continuación!!! Los machos ibéricos por excelencia, el auténtico cuerpo de élite, La Legión, siempre iba a visitar a los pobres sorteados aprovechando fechas frías, incluso si el destino era una instalación de zapadores de montaña en Huesca, y como Legionarios no podían ir de otra manera... En mangas (cortas) de camisa, y sin usar los últimos botones, que se vea el pecho! Porque tenían que demostrar que combatientes que eran capaces de compatibilizar el romper un tanque Leopard a puñetazos con el amor incondicional a una cabra no temían al frío, ni a la nieve, ni a los vientos árticos! Joder... lo mal que lo deberían pasar en una misión Africana... En definitiva, el no tener reguladores corporales en buen estado puede ser motivo de reconocimiento!

Mucho Jedi... pero va abrigado de arriba a abajo! Eso no es un hombre!

4- Lo mío si que duele

Esto ya es de lo más estúpido. La extraña competición por ser "el que más" se lleva también al campo de la desgracia. Intenta sacar, tras darte un cólico nefrítico, la conversación sobre lo mal que lo pasaste ante tus amistades. No faltarán testimonios de que lo tuyo no fue nada al lado de lo suyo! Si tú tenías arena o piedrecita en los riñones, ellos expulsaron vía penal (no hablo de la justicia punitiva) auténticas rocas de granito. Da igual el problema físico y lo mal que lo pases! Siempre hay alguien que te dejará de flojeras, porque él sufrió más que Chisuscraist en el Calvario. Qué queréis que os diga... yo he pasado por muchas situaciones dolorosas, y llevo fatal la pupita... pero nunca se me ocurriría presumir de mis gritos agónicos mientras un enfermero intentaba ayudar a incorporarme tras mi operación de hernia! De hecho querría borrar la imagen de mi memoria, y no presumir de ella! Por no repetir punto, ya que sería muy similar, pasa lo mismo con las desgracias... Da lo mismo la penuria por la que estés pasando... siempre encontrarás a alguien que en lugar de darte consuelo, te dará un mamporro en la boca con su auténtica tragedia griega...

Ríete del desembarco en Normandía! Hay quien lo pasó peor... y alardea de ello!

Estoy seguro de que habrá quien me jure enemistad eterna al leer estas líneas. Asumo que muy posiblemente sea yo el equivocado, y que estos 4 ejemplos que he expuesto son dignos de envidiar. Es por ello que, si me lo permitís, voy a escribir una pequeña carta abierta a modo de despedida para ese lector que no volverá a pasar por el Blog.

"Amigo Lector. Siento que hayas tenido que dejar de lado tu candidez y tu rostro se haya vuelto como el de un Pitbull al que quieren castrar sin ponerle bozal. Discúlpame, por favor. Para recuperar tu simpatía, te invitaría a comer, pero sé que dilapidaría mis ahorros, de modo que vamos a tener que buscar una alternativa. Tal vez algún viaje para recibir el nuevo año bañándote en el atlántico norte, así a ver si alivias un poco el calor de tu ira... No albergo esperanzas de que vuelvas a leerme tras mis palabras, así que te deseo un doloroso día, que sin duda, explicarás orgulloso mañana".


4 comentarios:

  1. Hola, Zancada Metálica!
    He disfrutado muchísimo leyendo esta entrada. En mi opinión, la vanidad y el alardeo son de las peores cosas que tiene el ser humano. No las soporto, mejor dicho! Y en el trabajo tienes que vivirlo día sí, día también. Ejemplo que entraría dentro de la categoría 4 de tu entrada: la persona X manifiesta que está muy estresada por algún tema chungo que le ha tocado hacer. Invididuo/a Y responde que eso no es nada comparado con lo que le tocó hacer a ella ayer y que de qué me quejo bla bla bla. En el trabajo se dan todas estas situaciones y de verdad que a estas alturas no dejo de sorprenderme de lo que puede llegar a ser nuestra especie, todo todo para alimentar nuestro ego.

    Me encanta cómo diseccionas la realidad! Quiero más entradas :-)
    Un abrazo.

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  2. Dona Invisible! Me alegro mucho de que dejes tus poderes de vez en cuando y te hagas visible en algunas ocasiones! Gracias por añadir ejemplos a la lista! En el tema de los trabajos, creo que tal vez sea más por ese nauseabundo instinto de supervivencia laboral, donde, como decía un ex compañero de curro, no se practica eso de "brillar con luz propia, y no apagar la de los demás". Puedes estar segura de que seguiré escalpelo en mano! Instrumentos de cirujano en manos de un carnicero!!! Un abrazo!

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  3. Estoy de acuerdo en todo lo que dices, pero a mí me pasa lo del calor y es verdad. Siempre tengo calor, siempre estoy sudado. Supongo que será mi metabolismo o que mi cuerpo tiene mucha grasita. Lo de lo mío si es dolor jajajajaja, eso lo he oido miles de veces. Los tíos somos unos quejicas, de hecho creo que si nosotros tuviesemos que parir, la raza humana ya se habría extinguido. Un abrazo y feliz semana santa

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    1. Hola Rafa! No, si no pongo en cuestión que haya gente que tenga más calor o frío de lo normal. El tema cuando presumen de ello como símbolo de hombría! Pasa muy buenas fiestas! Un abrazo!

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